Las bibliotecas están cambiando progresivamente sus colecciones y empiezan a adquirir portátiles y ebooks para realizar sus préstamos. Es más cómodo llevar una colección completa de buenos libros en un soporte electrónico que consultar los impresos en casa o en cualquier biblioteca. Esto implica una nueva distribución del espacio bibliotecario para liberarlos en favor del usuario. Habrá que estar atentos a todo esto como muestra este artículo de Nieves González, que plantea lo siguiente:
- Progresiva digitalización de las colecciones, aumento de las colecciones en soporte digital
- Deposito de las colecciones impresas que menos se usen en espacios intermedios, de fácil recuperación pero bajo demanda, liberando de esta forma los espacios útiles de la biblioteca.
- Esto permitirá que las bibliotecas dejen de ser espacios de almacenaje y se conviertan en auténticos espacios de aprendizaje.
- Y se traducirá en una redefinición de los servicios que la biblioteca presta a los usuarios:
- Una mayor relevancia del papel del bibliotecario en la docencia y las actividades de apoyo a la investigación.
- Una ampliación del papel de la biblioteca como compradora o gestora de licencias de sus materiales, a la gestión de los resultados de investigación, los conjuntos de datos y objetos de aprendizaje que se producen localmente.
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